Es un plato de preparación sencilla y muy apropiado para dietas. Es de gran utilidad para cualquier ocasión y en países cuya climatología se rige de acuerdo a las estaciones es aceptado durante cualquiera de estas.
También recibe el nombre de arroz con vegetales y es ideal para ingerir como plato principal o como acompañante de carnes, pescados o ensaladas. El nombre “a la jardinera” se aplica a diferentes recetas que requieren diversas verduras o vegetales, entre estos pueden mencionarse espinacas, brócoli, guisantes, alcachofas, pimientos o maíz entre muchos otros, lo cual le confiere una apetecible mezcla de sabores y agradable a la vista por la combinación de colores.
Las preparaciones a base de arroz son siempre bien acogidas por la mayoría de las personas. En Latinoamérica constituye un acompañante “casi obligado” para cualquier otro alimento seco; mientras que regiones como España y China son conocidas las típicas comidas realizadas a base de arroz.
El arroz a la jardinera es un plato bastante completo, saludable y de agradable sabor, que es bien tolerado y aceptado tanto por niños como adultos, tanto por personas sanas como por quienes padecen trastornos ligeros de salud ya que es de fácil tolerancia y digestión.
Receta de arroz a la jardinera
Ingredientes
- 3 tazas de arroz
- 2 zanahorias medianas
- 1 taza de guisantes
- 1 taza de maíz dulce (tierno)
- 2 cebollas medianas
- 1 pimiento rojo
- 1 pimiento verde
- 4 tazas de agua (puede sustituirse por caldo de verduras)
- 2 cucharadas de aceite vegetal
- 1 cucharada de mantequilla
- 1 cucharada de ajo molido
- 1 cucharada de cúrcuma molida
- 1 cucharadita de pimienta negra molida
- Sal, al gusto
Materiales adicionales
- Olla de fondo grueso o un caldero
- Sartén
Preparación arroz a la jardinera
A las zanahorias se les retira la piel y a los pimientos se les quitan las semillas y se trocean ambos en cubitos. En el sartén se coloca la mantequilla y se lleva a fuego lento hasta que se derrita. En ese momento agregamos la zanahoria, los pimientos, el maíz dulce y un cuarto de taza de agua. Tapar, removiendo constantemente controlando que el agua no se evapore totalmente, hasta que los vegetales adquieran una textura de mediana dureza, que generalmente se logra en 10 minutos. Retirar del fuego y reservar.
Se les retira la corteza a las cebollas y después de lavarlas se cortan en trozos pequeños, tipo cubitos. En la olla de fondo grueso se coloca el aceite, el arroz y la cebolla y se sofríen a fuego bajo durante 10 minutos aproximadamente. Inmediatamente se agrega el resto del agua (o caldo de verduras), los guisantes y los vegetales previamente sofritos junto al líquido que aun puedan tener. Finalmente se incorpora el ajo, la pimienta, la cúrcuma y la sal.
Se mezclan todos los ingredientes y se lleva al fuego, en un principio (10 minutos) a fuego alto para que hierva y después se baja a fuego medio dejando cocinar, la olla tapada, por 20 minutos más.
Se retira del fuego y se deja reposar un tiempo prudencial (aproximadamente 5 minutos) antes de servir.
Consejos útiles
Al sofreír los vegetales en el aceite y poca cantidad de agua es conveniente dejarlos ligeramente duros ya que completan la cocción mientras el arroz se cocina.
Si se quiere destacar más el color de los vegetales puede omitir el uso de la cúrcuma, quedando así el arroz blanco que mejor contrasta con el colorido de los vegetales.
En ocasiones la preparación tiende a secarse y el arroz aun está duro; de suceder esto se le puede agregar un poco cantidad adicional de agua.
La cúrcuma puede ser sustituida por azafrán o por cualquier colorante de uso culinario.
Al sofreír inicialmente el arroz se le puede añadir tomate frito lo cual le da a la preparación una tonalidad rojiza, además de darle sabor.
Aporte nutricional
En el arroz a la jardinera encontramos un alimento con un importante contenido en hidratos de carbono, vitaminas, minerales y fibra, a la vez que es bajo en grasas.
Una ración de arroz a la jardinera, con un peso aproximado de 100 gr, contiene 82 g de hidratos de carbono, 7 g de proteínas, 1 g de grasa; cantidades que proporcionalmente equivalen a 91% de hidratos de carbono, 8% de proteínas, 1% de grasa.
Además, esa misma cantidad aporta 540 mg de sodio, 180 mg de potasio, 17 mg de calcio, 120 mg de fósforo, 1,5 mg de magnesio y 0,8 mg de hierro; siendo también importante su contribución en vitaminas B1, B3, B5; B6 y ácido fólico.
Propiedades alimenticias
Incorporar el arroz a nuestra alimentación reviste especial importancia debido a que sus características nutricionales le confieren, entre otros beneficios, el reforzamiento del sistema inmunológico y propiedades antiinflamatorias, sin olvidar su acción relajante por la presencia del triptófano, aminoácido que forma parte del contenido proteico y que conjuntamente con las vitaminas del complejo B y el magnesio garantizan un mejor funcionamiento de las células neuronales.
Entre los carbohidratos destaca el alto contenido en almidón, elemento que digestivamente es absorbido de manera muy lenta lo que se traduce en un aporte gradual de energía y un control adecuado del contenido de azúcar en la sangre. Esto a la vez le confiere una acción relajante por el contenido en triptófano que es un aminoácido que forma parte del contenido proteico.